viernes, junio 05, 2009

Quiero Mi Pastel

Después de la ceremonia de primera comunión, en la iglesia nos invitaron a pasar a un salón donde se ofrecería comida gratis. Y yo, como tenía mucha hambre, sin pensarlo dos veces me dirigí hacia allá saboreándome de los sagrados alimentos que probaría.
Sin embargo, ya cuando iba a formarme en la fila, reflexioné en que en unos cuantos minutos tendríamos que salir hacia el restaurante para la comida formal, de modo que no era una buena idea.
Pero qué hambre tenía. Y las personas tan amables y gentiles, insistiendo en que me quedara a comer. A duras penas rechacé la invitación. En eso vi una mesa larga al final del salón, en la cual había una cafetera, vasos y unas cuantas rebanadas de pastel. Me brillaron los ojos y me fui a servir.
El pastel (o torta o como dicen en otros países) estaba sumamente delicioso, era muy sencillo pues consistía solamente de un pan esponjosito sabor a pastel (ya entenderán por qué) y cubierto con betún (o merengue como dicen en otros países) dulce de color blanco. Exquisito, que lástima que no me pude servir otra rebanada.
Me quedé con la idea de que era un pastel casero, pero ya hice mis averiguaciones y resulta que había sido comprado en un Sam's Club.
Desde ese domingo he estado añorando esos pasteles que hacía hace muchos años mi mamá, totalmente caseros, sin harinas preparadas; ella misma batía todos los ingredientes, harina simple, leche, huevos, etc. Luego hacía el betún con mucha azúcar, huevos y unas gotitas de limón. Era todo un manjar.
Pensando en esto, caigo en la cuenta de que estoy más que fastidiado y harto de los horribles pasteles (por muy caros que sean y por muy de moda que esté la pastelería) que he estado probando en toda fiesta de cumpleaños o celebración especial a la que he sido invitado últimamente: de frutas insípidas y/o dulcísimas, de fresas acidísimas, de las tres leches, de zanahoria que no sabe a zanahoria, de chocolates empalagosos a morir, de cajeta, de limón artificial, de coco, de crema chantilly, rellenos de M&M's... la lista es interminable.
Los pasteleros han enloquecido inventando cosas insólitas que agregarle a sus "creaciones", y también la gente que les celebra sus ocurrencias y compra sus pasteles.
Yo quiero mi pastel casero, pero en ninguna parte lo puedo encontrar. La gente ya no sabe qué es eso. Creo que voy a tener que aprender. Pato: help!

4 comentarios:

  1. Hola como estas? no seas tan melindroso.

    Un placer verte y recibbir tus correos en especial el del tiburon que bueno que mis epístolas te gustan.

    Te digo algo esa honestidd y desparpajo de mi blog también se da en mi vida real, me ha traído cosas buenas y malas, pero aprendí a vivir así con el corazón expuesto, no es lo más intelligente quizas, pero prefiero la transparencia o ella me prefiere a mi.

    Un abrazote

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  2. Hola elbibis,

    Me has hecho recordar cuando de pequeño entre mi madre y mi tía Mercedes (hermana de mi madre) que sabía hacer pasteles, íbamos a su pueblo natal para hacer algún pastel por celebrarse la fiesta de alguien (ya sabes: algún 3 años ó XV años).

    Era un show porque recuerdo saliamos de madrugada para estar muy temprano en el pueblo en donde además, una vez que llegabamos, todavá habia que caminar unos 2 o tres kilometros y llevar todo (TODO) lo necesario para hacer un pastel además de los panes ya elaborados porque en ese pueblo no había luz electrica: recuerdo que tenían incluso una especie de batidora manual para la aleboración del betún o merengue.

    Ya te imaginaras.

    Recuerdo eso y se me hace shingón por todo lo que pudieron y se aventarona a hacer (que shinga era eso) y por otro lado ahora ves como han cambiado los tiempos en donde en el mismo día puedes conseguir en el super un pastelote. Eso si, no tan sabrosos como los de mi tia.

    Un abrazote amigo.

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  3. Definitivamente todo me recuerda a el (risas)

    hace ya como 6 años vivia en el departamento de soltero y llego Israel y me dijo te voy a ahcer un pastel ya veras que me queda muy rico, y bla bla bla, en fin compramos todos los ingredientes hasta el turron hizo, todo para que el pastel fuera un exito compro tambien de esa crema que viene para decorar en fin yo me emocioné.

    Para no hacerte la historia muy larga despues de trabajar HORAS Y HORAS en el mendigo pastel lo metió a hornear... y que creez, no salio pastel salio una galleta enormeeee.

    Dura y quemada de un lado y cruda del otro jejej

    la verdad no estuvo rico pero la intension de quererme enamorar con el pastel y la aventura de hacer reposteria en casa fue muy divertido, ya no te cuento en que acabo la crema para decorar pero fue muy bueno jajaja.


    Nos vemos un saludos.

    que bueno que te uniste a la red de alvaro

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  4. Ja ja ja a al gente se le esta olvidando el sabor real de la comida, sacan cada chingadera que no me chinguen ja ja ja, a mi me gusta solo el pan, no el betun ni nada de eso, bueno casi no como pan, pero en fin, a tomar clases de cocina.
    Un saludo

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